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El Séptimo Rayo Revelador de la Nueva Era: Sus Cualidades

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El Séptimo Rayo Revelador de la Nueva Era: Sus Cualidades

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Reseña:


 

 

El Séptimo rayo: SUS Cualidades

 

Los aforismos que corporizan Sus cualidades dicen lo siguiente, y fueron esotéricamente susurrados en Sus oídos cuando Él “dejó el lugar más elevado y descendió a la séptima esfera para llevar a cabo el trabajo asignado”.

 

  1. Lleva tus herramientas contigo, hermano de la luz constructora. Talla hondo. Construye y da forma a la piedra viviente.

Cualidad…              poder de crear.

 

  1. Elige bien a tus trabajadores. Ámalos a todos. Escoge seis para hacer tu voluntad. Quede el séptimo en el este. Sin embargo llama al mundo a entrar en aquello que construirás. Fusiona todo en la voluntad de Dios.

Cualidad…              poder de cooperar.

 

  1. Siéntate en el centro y en el este también. No te muevas de allí. Envía tu fuerza para que haga tu voluntad y reúne nuevamente tus fuerzas. Usa bien el poder del pensamiento. Quédate quieto.

Cualidad…              poder de pensar.

 

  1. Observa a todas las partes entrar en el propósito. Construye hacia la belleza, hermano Señor. Haz todos los colores brillantes y diáfanos. Ocúpate de la gloria interna. Construye bien el santuario. Ten cuidado.

Cualidad…              revelación de la belleza de Dios.

 

  1. Vigila bien tu pensamiento. Entra a voluntad en la mente de Dios. Arranca desde allí el poder, el plan, la parte a desempeñar. Revela la mente de Dios.

Cualidad…              poder mental.

 

  1. Permanece en el este. Los cinco te han dado una Palabra amable. Yo, el sexto, te digo que la uses sobre los muertos. Revive a los muertos. Construye formas de nuevo. Guarda bien esa Palabra. Haz que todos los hombres la busquen por sí mismos.

Cualidad…              poder de vivificar.

 

… Espacio de Silencio…

 

Además de considerar los rayos como los canales a través de los cuales todo ser fluye, debemos reconocerlos como influencias operando en el mundo a su vez. Cada rayo tiene su período de máxima influencia, a la cual todo está sujeto en gran medida, no simplemente aquellos perteneciendo por naturaleza a ese rayo particular, sino aquellos en todos los otros rayos también. El largo período de influencia de cada uno está dividido en siete etapas, cada una de las cuales está cualificada por la influencia del período mayor de rayo, siendo intensificada cuando se alcanza su período propio de sub-rayo (i.e., la influencia del sexto rayo es máxima durante el período del sexto sub-rayo). Cuidadosamente debemos notar que el término “sub-rayo” se usa simplemente por conveniencia para designar el período de influencia más corto, no como indicando alguna diferencia en la naturaleza del rayo.

 

… puede que quizás lleguemos a la conclusión de que el tiempo durante el cual cada sub-rayo ejerce su influencia modificadora es entre ciento cincuenta y doscientos años.

 

Respecto a la previsión de la cual me ocuparé, por poco ortodoxo que pueda parecer a algunos de ustedes, se basará en dos factores: primero de todo, los indicios lógicos a ser reunidos desde sucesos pasados y presentes, los cuales condicionan el futuro inmediato e inevitablemente deben conducir a definidos y tangibles acontecimientos. Cualquier estudiante profundo de los asuntos humanos podría seguir la misma línea de razonamiento y llegar aproximadamente a las mismas conclusiones, siempre y cuando ame a sus semejantes lo suficiente para verlos verdaderamente como son y permita, por consiguiente, la aparición de lo inesperado. Y, segundo, lo que pueda decirles está basado en un conocimiento de las influencias de rayo que en este momento están afectando tan poderosa y efectivamente a la humanidad y su venidera civilización y cultura.

 

Por lo tanto, les pediría que lean con mente abierta lo que tengo que decir; les rogaría que relacionen mis palabras con las actuales condiciones mundiales y vean, surgiendo de los reinos de la subjetividad, esas fuerzas y potencias que están directamente cambiando la corriente de los pensamientos de los hombres, que están moldeando sus ideas e incidentalmente alterando la faz de la tierra y la política de las naciones.

 

La conciencialización de la actual necesidad mundial de pensadores iluminados y trabajadores subjetivos fue lo que impulsó a Aquellos Quienes guían, a dirigir de tal manera las energías espirituales entrantes que ocurrió la formación de los grupos esotéricos en todas partes; condujo también a la publicación de la masa de literatura mística y oriental sobre meditación y temas afines que hoy ha inundado al mundo. De allí también el esfuerzo que yo, un trabajador en el aspecto interno de la vida, estoy haciendo para enseñar la más nueva sicología en este tratado y así mostrar al hombre cuál es su equipo y cuán idóneo es el hombre para el trabajo para el que ha sido creado y que hasta ahora no ha logrado comprehender.

 

La fuerza y el efecto de la influencia del séptimo rayo, sin embargo, le revelará el trabajo mágico, y los próximos dos mil quinientos años ocasionarán tanto cambio y harán posible la efectuación de tantos denominados “milagros” que incluso la apariencia externa del mundo será profundamente alterada; la vegetación y la vida animal serán modificadas y desarrolladas, y mucho de lo que está latente en las formas de ambos reinos será traído a la expresión mediante el más libre flujo y la más inteligente manipulación de las energías que crean y constituyen todas las formas.

 

El mundo ha sido cambiado increíblemente durante los últimos quinientos años, y durante los próximos doscientos años los cambios serán todavía más rápidos y profundamente arraigados, pues el aumento de los poderes intelectuales del hombre está tomando impulso, y el Hombre, el Creador, está entrando en posesión de Sus poderes.

 

 

 

Extraído de: “Sicología Esotérica, Tomo I” y “El Destino de las Naciones”. Alice Ann Bailey.

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